lunes, 28 de mayo de 2012

Cookies con avena, chocolate y avellanas

Hoy ha sido uno de esos días que, sin hacer gran cosa, se ha pasado sin enterarnos. Por la mañana he hecho unas galletas, cuajada, he refrescado la masa madre, que a veces me da mucha pereza, y por supuesto, la comida, así que la tarde la hemos aprovechado en plan hortelano, ¡porque no todo va a ser amasar y hornear!

Niños en el campo
En casa nos encanta comer verdura, así que esta época del año la disfrutamos a tope poniendo la huerta a punto. Todo el mundo anda revuelto por esta zona, y es que debido a las lluvias no hemos podido empezar antes, y el que más y el que menos, tiene una huertuca que atender.

Sembrando en la huerta y con la regadera
Nos gusta que los niños participen en los preparativos, y que vean de dónde salen la mayoría de las verduras que luego van a comer. Y a ellos lo que más les gusta es eso de guarrearse con la tierra y el agua. Al principio nos daba miedo que cogieran la azada, pero la verdad es que la manejan como auténticos hortelanos. ¡Han disfrutado como enanos sembrando judías verdes!. Primero han puesto las alubias a remojo mientras Óscar preparaba los surcos. Después Alonso ha sembrado sus propias alubias, y entre los dos se peleaban por agarrar la regadera para regarlas, pero finalmente no han podido hacerlo porque es tan grande que no podían con ella.

Sembrando judias 
En fin, hemos disfrutado del aire libre y de la huerta, y de vuelta a casa, han cenado, se han tomado su lechita con unas galletas de avena, y ¡a la cama!. ¡Y qué a gusto nos hemos quedado! Cuando ellos duermen es nuestro ratito de relax, porque durante todo el día no paran y hay que estar continuamente pendiente de ellos. Ellos necesitan descansar para volver mañana a su frenética actividad, y nosotros necesitamos que ellos descansen para poder descansar también.

Cookies con avena, chocolate y avellanas

Ya sabéis que tengo debilidad por la avena. Hago pan con avena y cerveza, pan de semillas con avena y harina de espelta, galletas de avena, estas cookies, y en un futuro seguro que seguiréis viendo más recetas con avena. ¡Es que no me canso de ella!. Y estas cookies están especialmente buenas. Además son las típicas galletas que después de 4 días están igual de crujientes que recién horneadas. ¡Riquísimas! De verdad que os animo a que las hagáis porque además de ricas no pueden ser más sencillas de hacer: sólo mezclar y hornear, ¿os atrevéis? ¡Venga!

Cookies con avena, chocolate y avellanas
Cookies con avena, chocolate y avellanas

INGREDIENTES:

130 g de harina de repostería
125 g de mantequilla a punto pomada
100 g azúcar moreno
100 g azúcar blanquilla
2 huevos a temperatura ambiente
190 g de copos de avena
50 g avellanas tostadas troceadas
60 g de chocolate de cobertura en trozos pequeños
2 teaspoon de esencia de vainilla (10 ml)
1/4 teaspoon de levadura química (Royal) (1ml)
1 pellizco de sal

- mezclamos la mantequilla con los azúcares y la vainilla y batimos hasta blanquear la mezcla
- añadimos los huevos, de uno en uno y batimos bien para incorporarlos a la mezcla
-añadimos la harina, junto con la levadura y la sal, previamente tamizadas
- finalmente agregamos los copos de avena, junto al chocolate, y a las avellanas
- con una cuchara vamos colocando porciones de masa sobre una bandeja de horno engrasada o sobre un papel de hornear de modo que quede entre ellas suficiente espacio
- horneamos a 180ºC durante 10 ó 12 minutos
- sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla

Cookies con avena, chocolate y avellanas
Cookies con avena, chocolate y avellanas
Esta receta está adaptada del libro "Galletas, pastas y mantecadas" de Anne Wilson.

Aquí, al final de la entrada, tenéis datos interesantes sobre la avena.

domingo, 20 de mayo de 2012

Pechugas de pollo rellenas al vapor

Os traigo hoy una receta riquísima con la que participo en el concurso ¿Cocinamos al vapor...? de ¡Sano y de rechupete!, Laura proponía elaborar una receta cuya forma de cocción fundamental fuera el vapor. Así que me puse manos a la obra, y aquí os traigo estas pechugas, supersanas y vaporizadas.

pechugas de pollo rellenas
piñones

En casa la carne que más comemos es la pechuga de pollo. A parte de ser una carne bastante magra, para mi tiene otra ventaja, y es que los niños la comen muy bien. Si les pongo un filete, que rara, rarísima vez lo hago, lo empiezan a masticar y al final se les hace "bola", así que hace mucho decidí que pasaba de los filetes: pechugas o carne picada, es lo que mejor comen, y no se aburren de comerlas porque las preparo de muchas maneras diferentes. Una de ellas es la que os traigo hoy, y de verdad os digo que os animéis a hacerlas, ¡están buenísimas!

Ingredientes:

unos 500 g de pechugas (pollo o pavo)
3 huevos
calabacín, puerro, patatas o las verduras que queramos
20 g de piñoñes pelados
jamón serrano
frutas desecadas (pasas, ciruelas, orejones)
1 cebolla
sal
aceite de oliva virgen extra
Vinagre balsámico de Módena
4 teaspoon (4x5ml) azúcar

huevo batido y piñones
pechugas de pollo rellenas

- engrasamos una bandeja de horno pequeña, o colocamos sobre ella papel antiadherente. Batimos los 3 huevos, los echamos en la bandeja y la metemos al horno, a unos 150ºC durante 15 minutos hasta que se cuaje una tortilla
- troceamos el puerro, calabacín y las patatas u otras verduras que nos gusten, y las cocemos al vapor añadiendo en el agua de cocción sal y alguna hierba o especia que nos guste. Yo eché un poco de estragón.
- para el relleno picamos en trozos muy pequeños el jamón y las frutas desecadas, añadimos los piñones y lo mezclamos todo
- extendemos sobre las pechugas fileteadas la tortilla, y encima de ésta el relleno, enrollamos con cuidado y atamos las pechugas con hilo o con una red. A continuación las cocemos al vapor durante aproximadamente 20 minutos.
- para que las pechugas se pongan un poco doradas y nos resulten más agradables a la vista, después de cocerlas las meteremos al horno, con el grill encendido, hasta que se pongan un poco doradas.
- mientras preparamos las pechugas hacemos unas cebollas caramelizadas: picamos la cebolla en juliana y la ponemos a pochar en la sartén muy despacito con un poco de aceite. Cuando empiece a ponerse transparente y se haya reducido bastante, añadimos el azúcar y un poco de vinagre balsámico, y dejamos que sigan haciéndose muy despacio, hasta que se van poniendo marroncillas. 
- para presentar el plato en la mesa fileteamos los redondos de pechuga, y los acompañamos con la cebolla y con las verduras cocidas al vapor. Sobre las verduras, si queremos, podemos añadir un hilillo de aceite de oliva virgen extra.

pechugas de pollo rellenas
pechugas de pollo rellenas

 Datos de interés y sugerencias:

- cocinar al vapor es uno de los métodos más sanos para preparar alimentos. Es perfecto para alimentos que no necesitan absorber mucha agua, como verduras, pescados, moluscos, huevos e incluso carnes. Los nutrientes, el color y el sabor se conservan mejor que cuando se hierven los alimentos, porque no se diluyen en el agua, aunque a cambio, el tiempo de cocción es mayor.
- si no se tiene utensilio adecuado para cocer al vapor, se puede hacer añadiendo un poco de agua en una cazuela, apoyando sobre ella un colador, y tapando para que no se escape el vapor
-hirviendo la verdura con agua conserva el 70 % del betacaroteno y el 45 % de su vitamina C, mientras que si se cuece al vapor, se conserva el 80 % de betacaroteno y el 70 % de vitamina C.
- si queréis que las pechugas queden aún más jugosas, en vez de hacer la tortilla del relleno al horno y tan sencilla, podéis freir cebolla, y hacer una tortilla de cebolla, en sartén o en horno, como queráis. Yo lo he hecho así para que la receta sea lo menos calórica posible.

lunes, 14 de mayo de 2012

Torta de aceite

Este fin de semana ha sido bastante movido. Y eso que no hemos salido de casa.

Hemos tenido la visita de mi hermana, con mi cuñado y sus dos niñas, y aunque para dormir estábamos en distintas casas, las comidas y las cenas han sido en común, y eso hace que haya más lío.

Y es que en una casa de pueblo, como la nuestra, cuando se juntan varios niños la locura que tienen aumenta de modo exponencial al número de niños que hay. En este caso eran cuatro, aunque lo dejaremos en 3, porque la cuarta aún es muy pequeña y da guerra, pero de otro tipo. 

Pues tres niños, entrando y saliendo de casa continuamente, que si quiero agua, que si tengo hambre, que si dame un papel para pintar..., os lo podéis imaginar ¿a qué sí?

Torta de aceite

La verdad es que se lo han pasado genial, todo el día en el patio, y sin acordarse de la tele lo más mínimo. ¡Y es que cuando hace bueno es una gozada!. Uno disfruta de verles lo bien que se lo pasan, y encima en esta ocasión no ha habido peleas entre primos, ¡será que ya se están haciendo mayores!, porque hasta hace poco lo normal era que estuvieran deseando verse, pero al cabo se un rato se empezaban a chinchar y a pelear.

Esta noche han caído en la cama rotos de puro cansancio, pero mañana estarán otra vez como si tal cosa, listos para jugar y disfrutar. ¡Son incansables! ¡Pero es una alegría verles jugar!

Ha sido un fin de semana para recordarlo y apuntarlo en el calendario. Y para apuntar también es la receta de este pan que os traigo hoy. Ya llevaba mucho tiempo sin publicar ningún pan, y este lo tenía pendiente desde hace semanas. Es un pan típico castellano, y está buenísimo, porque además de llevar lo que llevan todos los panes (harina, agua y sal), lleva aceite de oliva virgen extra, y llevando este aceite no puede haber nada que esté malo. ¿Quién puede dar más por menos?

Torta de aceite

La receta la copié hace al menos 20 años de un libro que se llama "Panadería Española", o algo así. He adaptado las cantidades y he eliminado el mejorante, pero por lo demás es más o menos igual. Y como últimamente voy de concurso en concurso, como de oca a oca, resulta que voy a enviar esta receta a "Cocina con Uno de Dos", y ¡a ver si hay suerte!.

Ingredientes:

500 g de harina de media fuerza (entre 10 y 11,5 % proteínas)
250 ml agua
10 g de sal
200 g de masa madre
5 g de levadura prensada
aceite de oliva virgen extra

- de los 250 ml de agua retiro unos pocos ml y deslío en ellos la levadura
- mezclo juntos todos los ingredientes y amaso, como siempre con la técnica de Dan Lepard, tal y como explico aquí.
- cuando tengo la masa lista la divido en dos porciones, las aplasto hasta que midan unos 2 cm de grosor y las doy forma redonda; las coloco sobre un papel de horno, o una tela de lino espolvoreada de harina, y dejo que reposen hasta que más o menos hayan duplicado su volumen, tapándolas con un paño húmedo o con film de cocina untado de aceite para que no se peguen a él
- cuando las tortas hayan fermentado, hacemos unos agujeros en ellas con los dedos, y los rellenamos con un poco de aceite de oliva virgen extra.
- finalmente las horneamos, en el horno precalentado a unos 200ºC y sin vapor, durante unos 35 minutos
- cuando las saquemos del horno, las untaremos de aceite con un pincel, y después las dejaremos enfriar sobre una rejilla

Torta de aceite

Sugerencias:

- si os apetece hacer esta receta pero no tenéis masa madre, podéis hacerlo igualmente con la cantidad de levadura indicada en los ingredientes.
- este pan también se suele llamar torta de Aranda
- lo mejor es consumirlo en el día, pues al ser plano y tener poca miga se suele quedar seco si se deja de un día para otro. Otra solución es guardarlo en una bolsa, entonces para que quede mejor al comerlo y no tan "gomoso", se puede meter un poco en el horno antes de comerlo.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Flan de queso

Como quien no quiere la cosa ya estamos a mitad de semana, ¿qué os decía yo de que los días se pasan volando?.  Pero en fin, no nos vamos a agobiar y vamos a sacar provecho del tiempo que tenemos. Y para que se note que no lo malgastamos ni un ápice os propongo hacer esta receta de flan de queso. La he adaptado de la receta de Pamela, de Uno de Dos

Flan de queso

Me gustó por varios motivos, primero porque se trata de un flan, y a mi los flanes me vuelven loca y a los niños ni os cuento. Hay muchas cosas que les digo que son flan y se las comen que da gusto, como la leche frita, o la quesada pasiega. Al fin y al cabo se parecen bastante, huevos, leche, azúcar...¿no es verdad?. En segundo lugar me gustó por lo del queso, porque estoy en una época bastante "quesera". Llevo tiempo haciendo varios "experimentos" con queso... ya os contaré. Lo tercero fue por lo rápida que es de hacer, y porque no hay que encender el horno. Y por último, me gustó la idea de participar en un concurso, aunque no creo que vuelva a sonar la flauta tan seguido, pero lo importante no es ganar, sino participar para dar vidilla al asunto ¿no os parece?

Flan de queso

Pues aquí tenéis mi versión del flan de queso:

Ingredientes: 

Para el caramelo: 

250 g azúcar, unos 50 ml de agua y 10 ml de zumo de limón (2 teaspoon)

- colocamos en un cazo el azúcar, lo ponemos al fuego y vamos moviéndolo (el cazo) hasta que todo el azúcar se ha fundido y se ha puesto del color marroncillo del caramelo. En ese momento lo retiramos del fuego y añadimos el agua y el limón. Volvemos a ponerlo al fuego y dejamos que hierva hasta que espese.
Una vez que se ha enfriado lo añadimos a las flaneras.

Para el flan:
125 g de queso fresco
200 ml de nata (un brick pequeño)
250 ml de leche
100 g de azúcar
6 hojas de gelatina neutra

- ponemos la gelatina a remojo en agua durante unos 10 minutos y pasado ese tiempo la retiramos del agua y la escurrimos
-calentamos la leche y la nata mezcladas y disolvemos en ellas el azúcar. Añadimos la gelatina escurrida a la mezcla anterior y removemos para que se deshaga y se disuelva. Añadimos el queso y batimos hasta que esté bien triturado y quede una mezcla homogénea.
- rellenamos los moldes de flan que previamente hemos caramelizado, y dejamos enfriar en el frigorífico hasta que solidifique

A la hora de desmoldarlo yo lo he servido acompañado de grosellas, moras y mermelada de moras, aunque cualquier fruto rojo o cualquier mermelada hecha con estos frutos le va que ni pintado.

Flan de queso

Sugerencias:

- ¡cuidado con el azúcar! Ni se os ocurra meter el dedo para probarlo si no queréis que os salga una buena ampolla. El azúcar quemado coge temperaturas muy altas. 
- cuando lo pongáis a espesar tened en cuenta que el caramelo caliente es más fluido que cuando se enfría, por lo que aunque os parezca que todavía está liquidillo seguramente que esté listo
- no os paséis calentando el azúcar, pues entonces se os quemará más de la cuenta y en vez de saber dulce y rico sabrá amargo y malísimo
- en las sugerencias de estos minicupcakesen la receta del kepchup os recuerdo lo buenos que son los antioxidantes que contienen estos frutos rojos
- respecto de la gelatina neutra, o cola de pescado, aporta proteinas (9 aminoácidos esenciales), es baja en grasa y en calorías, fácil de digerir, y buena para las articulaciones

lunes, 7 de mayo de 2012

Helado de fresas

Pues como quien no quiere la cosa empezamos nueva semana de mayo. ¡Madre mía, qué deprisa pasan los días y las semanas!. No sé si os pasará como a mí, pero cuantas más cosas planeo hacer, menos me da de sí el tiempo. Será que quiero hacer más cosas de las que puedo. O será que todavía no me he acostumbrado a lo que me frenan los niños. 

Helado de fresas

La verdad es que con ellos nunca puedes planear bien lo que vas a hacer. De repente te encuentras con que tienes que bañar urgentemente a uno, que acaba de entrar del patio lleno de barro y mojado, aunque en la calle haga 10ºC. O tienes que ir a urgencias a que cosan una barbilla rota, o tienes que estar con ellos mientras te llenan la mesa del comedor de coches y aplastan una masa de arcilla haciendo carreteras para los coches. En fin, ese tipo de cosas...

Pero cuando puedo robarles un ratito, me gusta hacer mis "experimentos particulares". Hace poco, Silvia, de Mi Dulce Tentación, hizo un helado de fresas que a mi me dio envidia. Así que, decidí estrenar yo también la temporada de los helados, porque como dice mi madre, "si no hago lo que veo todo me meo", la envidia es así, así que yo también hice un helado de fresas. Y aunque no os lo creáis estaba buenísimo. Los niños lo comieron fenomenal. Y la verdad es que es una merienda muy sana, porque al fin y al cabo es un batido de frutas, pero congelado, con lo cual tiene otro atractivo. 

Os recomiendo que lo probéis, porque es supersencillo de hacer, y ¡está tan rico!

Helado de fresas
Helado de fresas

Ingredientes:

500 g de fresas
1 brick de nata de montar (unos 200 ml)
250 ml de leche entera
150 g de azúcar
1 tablespoon de vodka
1 tablespoon de vinagre

- lavamos las fresas y las troceamos, colocándolas después en un bol con el vinagre y una cucharada pequeña de azúcar (teaspoon). Las dejamos así macerando al menos una hora para que suelten el juguillo
- pasado ese tiempo batimos las fresas con el resto de ingredientes
- pasamos el batido por un colador para eliminar las pepitas de las fresas, lo metemos a congelar en la heladera ¡y ya está!

Helado de fresas

Datos:

- para que en los helados no nos aparezcan cristales de hielo y queden lo más cremosos posibles, hay varios modos de lograrlo: 1) a mayor proporción de grasa menos cristales se formaran; 2) el alcohol también impide su formación, de ahí lo de añadir vodka; 3) añadir azúcar invertido (aunque yo no lo he usado en este), y por último, 4) hacer el helado con heladera también impide que aparezcan cristales, pues al estar continuamente agitándose, a medida que se forman los cristales se van rompiendo.

- si no tenéis heladera queda igual de rico, pero entonces hay que sacar cada poco el helado del congelador y darle vueltas, a mano, para romper esos cristales. Al principio conviene hacerlo con bastante frecuencia, durante la primera hora yo lo haría cada 15 ó 20 minutos, "rascando" los cristales que se empiezan a formar por las paredes de recipiente. Después de esa primera hora, cuando ya hemos impedido la formación de los primeros cristales, podemos espaciar el tiempo de batido a una media hora más o menos, hasta que veamos que el helado ya está hecho.
Si usamos un recipiente de metal que sea ancho en vez de alto este proceso será más rápido, y nos resultará más fácil a la hora de batir el helado.

- conviene sacar el helado del congelador al menos 10 minutos antes de servirlo

- como veis para hacer un helado no hace falta añadir grasa vegetal, ni jarabe de glucosa-fructosa, ni mono y diglicéridos de los ácidos grasos, ni nada por el estilo. Por cierto, que esos mono y diglicéridos de los ácidos grasos yo siempre me he preguntado ¿de qué ácidos grasos serán?
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